PRÓXIMO FORO
Sábado, 17 de marzo de 2012, a las 11:00 horas
RELIGIÓN Y EVOLUCIÓN:
¿HAY UN PUNTO DE COINCIDENCIA?
LUGAR DE REUNIÓN
Libro Técnico,
C/ Alfonso XI, nº15 – Algeciras
RELIGIÓN Y EVOLUCIÓN:
¿HAY UN PUNTO DE COINCIDENCIA?
LUGAR DE REUNIÓN
Libro Técnico,
C/ Alfonso XI, nº15 – Algeciras
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Historia criminal del cristianismo
Historia criminal del cristianismo (en alemán: Kriminalgeschichte des Christentums) es el título de la obra principal en diez tomos del autor y crítico de la Iglesia Karlheinz Deschner. Describe detalladamente los errores y crímenes que se atribuyen a las distintas iglesias, confesiones, sectas, asociaciones y sus representantes, así como de dirigentes cristianos en el transcurso de la historia de la Cristiandad. La obra quiere tratar la historia del Cristianismo desde su origen bíblico hasta el presente. Desde 1986 se habían publicado nueve tomos en alemán.
Traducciones parciales o completas de esta ingente obra, de más de 5000 páginas, han sido editadas en italiano, español, griego, polaco y ruso. (...)
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Creacionismo y Evolucionismo
Ciencia y Religión
Tanto si se cree que el Principio fue provocado por un Ser superior como si se piensa que la base del Ser Vivo es puramente biológica, la incógnita sigue ahí.
Si se tuvieran que enumerar las diferentes explicaciones que existen del posible origen del Hombre, quizá no habría suficiente espacio en un solo artículo. No pasa lo mismo con los factores que influyen en la credibilidad de todas estas versiones que suelen ser de influencias religiosas o de motivaciones científicas.
El caso es que, tanto si se cree en una como en otra versión, el misterio de ¿dónde venimos? es inmenso y siglo tras siglo es una de las incógnitas que el Ser Humano ha tratado de desentrañar. (...)
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¿Evolución o Creación?
Recientes investigaciones derrumban por completo la teoría de la evolución y le dan nueva credibilidad a la creación de la vida por una inteligencia superior ¿Para Ripley´s? Adéntrate en este fascinante artículo
¿Evolución o Creación?
Años atrás la teoría de la creación de todo ser viviente por Dios no se ponía a discusión, pero surge Charles Darwin y, con su teoría de la evolución, parecía que explicaba por completo la existencia de la vida en la tierra.
Pero Charles no contaba con los avances científicos de nuestros días. (...)
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RESUMEN
Debate organizado por Foro Identidad
y celebrado el 17 de marzo de 2012.
Asistentes: Carlos P, Daorino, De
Lorenzo, JDia, Mago M., Pablo de La Línea, TRIV.
Duración: 11:10-13:10 horas.
Autor de esta síntesis: De Lorenzo
|
JDia realiza primero una breve introducción del debate de
hoy, aclarando con suma paciencia, para los aún necesitados de estas
aclaraciones, el sentido general del debate y comentando algunos de los textos
propuestos. Seguidamente abre el debate propiamente dicho con las afirmaciones
siguientes: “desde una postura religiosa abierta no hay contradicción entre
religión y evolución. El universo es evolución, si bien la ciencia no puede
captar el impulso interno”. De Lorenzo aporta un dato que va en la línea de
apuntalar la primera de las afirmaciones de JDia: en las últimas páginas de El origen de las especies, el propio
Charles Darwin compatibilizada religión y evolución.
A continuación, JDia habla de un texto en el que se
explica que existe un mecanismo corrector en el código genético que hace que no
sufra muchas mutaciones. Introduce así un concepto que él denomina “fijismo” y
que atañe al código genético. TRIV, como animado por este comentario, expone
que Darwin tenía tanto formación teológica como transformacionista pero que,
sin embargo, su teoría ataca la teleología. TRIV señala que hay seres que no
han evolucionado desde hace tiempo. Nada exento de pasión pregunta este
contertulio acerca del porqué se da la evolución en una especie y no en otras.
La evolución parece no afectar a todas las especies por igual, sostiene.
Concluye con una afirmación categórica: “se niega la teleología en la biología,
pero a la vez no se explica la aparición de la inteligencia”. Como recogiendo
esta última afirmación, JDia manifiesta que en el hombre la mente influye en
las partículas, siendo el poder subjetivo tremendo y tremendo su poder sobre la
materia.
De Lorenzo trata de contextualizar el alcance del
evolucionismo de Darwin. Dice que, resumiendo mucho, esta teoría enseña que
para una misma especie existen caracteres (físicos y psíquicos) diferentes
entre los individuos y que si esos caracteres incrementan la llamada fitness
darwiniana (o descendencia de un tipo determinado), aumentan igualmente su presencia.
Y este proceso acumulado es la base de la formación de razas dentro de una
misma especie y, a partir de ellas, de nuevas especies.
El debate ahora se vuelve veloz. JDia vuelve a su idea
anterior expresando que él habla de inteligencia profunda. TRIV destaca que
Darwin no sabía que los genes crean proteínas. De Lorenzo, elocuente, exclama
que la teoría de la evolución está para explicar lo que explica, y que no se le
puede pedir más. Esta teoría enseña el modo de formación de nuevas especies,
añade. También dice que no hay que pedirle a la ciencia en general más
explicaciones de las que puede dar. Pero TRIV parece no darse por enterado de
esto último y afirma que el mosaico de la teoría del todo no está completo y
que es necesario avanzar. Se produce a continuación un momento poco frecuente
en nuestros foros: una peculiar atmósfera nos envuelve a todos ante una
confluencia insólita entre los contertulios JDia y TRIV. Todos se hacen
conscientes de esta situación, llegándose incluso a felicitar ambos.
Pero De Lorenzo, ahora convertido en tormenta, disipa
semejante atmósfera tronando que Darwin era más humilde intelectualmente que
muchos científicos de hoy en día que dicen conocerlo, pues Darwin conocía sus límites,
concluye.
El debate se anima, si cabe. JDia sostiene que no hay que
renunciar a saber cada día más, algo que acompaña de una reflexión con respecto
a la ciencia, según la cual, a la vez que las ciencias particulares se
multiplican, existe una tendencia a la unificación. TRIV se pregunta por la
utilidad de la evolución si ésta no implica un avance. De Lorenzo responde que
la evolución está exenta de moralidad y que no presupone avance. Daorino, como
recogiendo el anterior pensamiento de De Lorenzo acerca de los límites de la
ciencia, dice gráficamente: “un montañero sabe que a lo máximo que puede
aspirar es a subir el Everest”.
Pero JDia también pone un ejemplo. Habla de un crucero y
de un estudio de los elementos que lo componen. Conociendo el funcionamiento de
la maquinaria se conocerá algo del crucero, pero muy poco. Lo mismo ocurre con
el estudio de las cocinas del crucero. La enseñanza de este ejemplo está, según
comenta su autor, en que quién se fija tan sólo en un elemento no explica gran
cosa y eso mismo ocurre con cada ciencia particular con respecto a la ciencia
general, concluye.
TRIV, un poco a su aire, se pregunta: “¿cómo puede haber
intencionalidad en la aparición de la conciencia y de la inteligencia, siendo
necesaria para su aparición la intencionalidad y no existiendo?”
De Lorenzo inflexiona y realiza un recorrido histórico
por el escenario del rechazo a la teoría evolucionista de Darwin. Indica que en
el siglo XIX semejante teoría fue rechazada por muchos eclesiásticos, mientras
que el siglo XX y XXI se ha granjeado la hostilidad de todo tipo de marxismo,
tanto del de tipo economicista (y aduce como prueba el caso Lysenko y su
rechazo de las leyes de Mendel por entrar en contradicción con determinados
postulados de Marx), como del de tipo cultural, mencionando la actual negación
por parte de los progresistas de la existencia de diversidad (de razas) en el
hombre, todo ello bajo la coartada de la corrección política.
JDia relativiza la importancia de las razas aduciendo las
conclusiones del genetista Cavalli-Sforza el cual, tras reconocer su
existencia, sostiene que el mestizaje es positivo. De Lorenzo no está de
acuerdo en absoluto con este extremo ya que, dice, el mestizaje interrumpe de
repente el trabajo realizado por la evolución durante mucho tiempo para adaptar
los organismos al ambiente. A lo cual responde JDia que la importancia de la
adaptación en el caso de los humanos no es tanta ya que la civilización
contribuye a que nos podamos adaptar artificialmente de modo mejor.
Tiene lugar a continuación una encendida discusión entre
Daorino y TRIV. El primero, algo pendenciero, advierte a TRIV de que supone una
pérdida de tiempo el tratar de responder a ciertas preguntas que éste se hace y
que nunca van a llegar más allá de su mismo planteamiento. TRIV, más contrariado
de lo habitual en él, sabedor de la fortísima afición montañera de Daorino,
apodado en algunos círculos como “El jabalí”, responde que para él supone una
pérdida de tiempo ir al monte a caminar. Y añade que esto mismo le pasaba a
Hegel. Daorino denuncia que TRIV quiere justificar su ser-aburrido con la anécdota
de Hegel. Tras esto, como queriendo conciliarse con su fornido contrincante,
pero sin dejar de reivindicarse a sí mismo, TRIV hace un elogio de la pérdida
del tiempo y de dedicarse cada uno a lo que quiere.
Seguidamente se produce el segundo suceso extraordinario
en esta sesión: Pablo de la Línea y Daorino, comentando las pretensiones
sapienciales de TRIV, confluyen. El primero dice de TRIV que éste quiere subir
y subir peldaños sin haber hurgado abajo. A esta frase sucede un rapidísimo, y
no del todo cordial, intercambio de impresiones entre Pablo de la Línea y TRIV.
Este último afirma, divertido y como queriendo divertir a todos, que para
hablar de masa hay que hablar del panadero. Pablo de la Línea, ahora con
bastante mal humor, concluye el debate diciendo que no le gustan en absoluto
este tipo de chascarrillos.
Frases célebres:
- TRIV: La evolución parece no afectar a todas las especies por igual.
- De Lorenzo: La teoría de la evolución está para explicar lo que explica, y que no
se le puede pedir más.
- Daorino: Un montañero sabe que a lo máximo que puede aspirar es a subir el
Everest.
- Pablo de la Línea: TRIV quiere subir y subir peldaños sin haber
hurgado abajo.
